Hempel pone el ejemplo de Semmelweis y su lucha contra el fiebre puerperal. Para intentar explicar (y eradicar) la causa de la mortalidad más alta en una división del hospital donde trabajaba, Semmelweis formuló varios hipótesis y les sometió a la contrastación empírica. Antes de llegar a la explicación correcta (la materia “cadavérica” o “pútrida”, o sea los microorganismos bacteriales y virales) el tuvo que rechazar muchos hipótesis que se mostraron falsos cuando puestos a la prueba empírica. Podemos decir, que una hipótesis por eso es un enunciado acerca de relaciones (p.e. causales) en el mundo real. La verdad o falsedad de este enunciado se muestra aplicando las deducciones de tal hipótesis al mundo para ver si pasan las cosas predichas por la hipótesis. La hipótesis sirve para mejorar las condiciones en el mundo porque permite cambiar la conducta de manera provechosa en base de un conocimiento más amplio del mundo. Es importante formular hipótesis y reconocer lo que son, porque su verdad depende inmediatamente de los acontecimientos empíricos (no como dogmas o especulaciones) y pueden ser verificadas o falsificadas por experimentación y observación. También pueden ser ampliadas o modificadas cuando se gana más conocimiento.
“Filosofía de la ciencia natural” de C.G. Hempel – Un resumen crítico
En la primera parte del segundo capítulo, Hempel pone el ejemplo de Semmelweis y su lucha contra el fiebre puerperal. Para intentar explicar (y eradicar) la causa de la mortalidad más alta en una división del hospital donde trabajaba, Semmelweis formuló varios hipótesis y les sometió a la contrastación empírica. Antes de llegar a la explicación correcta (la materia “cadavérica” o “pútrida”, o sea los microorganismos bacteriales y virales) el tuvo que rechazar muchos hipótesis que se mostraron falsos cuando puestos a la prueba empírica. Podemos decir, que una hipótesis por eso es un enunciado acerca de relaciones (p.e. causales) en el mundo real. La verdad o falsedad de este enunciado se muestra aplicando las deducciones de tal hipótesis al mundo para ver si pasan las cosas predichas por la hipótesis. La hipótesis sirve para mejorar las condiciones en el mundo porque permite cambiar la conducta de manera provechosa en base de un conocimiento más amplio del mundo. Es importante formular hipótesis y reconocer lo que son, porque su verdad depende inmediatamente de los acontecimientos empíricos (no como dogmas o especulaciones) y pueden ser verificadas o falsificadas por experimentación y observación. También pueden ser ampliadas o modificadas cuando se gana más conocimiento.
Hay una forma muy directa de contrastar una hipótesis: cuando una explicación menciona factores que no están en el mundo real, ya se “ve” que está falsa. Pero normalmente es más difícíl. Como dije arriba, de una hipotésis (H) surgen muchas deducciones o implicaciones (I) que pueden ser usadas para veri- o falsificarla. Entonces, cuando I se muestra a no ser verdadero, H tampoco lo puede ser y ya está falsificada. Pero cuando se muestra verdadero que I, entonces eso todavía no significa que H sería verdadera (sería una falacia lógica). Por eso hay que comprobar H encontrando y comprobando muchas implicaciones, es decir que, si I1, I2, I3, etc... todos son verdaderas, es muy probable que H lo es también: H está corrobada. Hay ciertas hipótesis que no son contrastables por inspección u observación directa. Por eso se toma una implicación de esta hipótesis y se la contrasta con los hechos empíricos (implicación contrastadora). Las implicaciones contrastadoras, pues, pueden falsificar una hipótesis cuando ellas mismas son falsas, o corrobarla cuando son verdaderas. Aunque nunca se puede verificar una hipótesis completamente, es importante contrastar muchas implicaciones suyas con la empiría para apoyar la hipótesis y ganar una cierta certeza acerca del mundo.
Hay dos posibilidades de llegar a forumular hipótesis acerca del mundo. La inferencia deductiva tiene una estructura lógicamente válida (p.e. esa que también es el tercer axioma de la lógica de Church): (p → q) → (-q → -p). Otra forma sería la deducción de conclusiones a partir de premisas verdaderas en forma de leyes generales no analíticas. Por la necesariedad lógica se puede tener certeza absoluta del resultado si las premisas son verdaderas. En el caso de la inferencia inductiva, sin embargo, no hay certeza absoluta, sino sólo probabilidades más o menos altas porque aunque se infiere a partir de premisas generales hacia un enunciado particular, muchas veces se pueden encontrar ejemplos específicos empíricos donde las premisas no son verdaderas porque las premisas también nacieron de la observación que se ha hecho hasta ahora (un ejemplo muy bueno pone el economista Nassir NahimTalleb: Todos los cisnes que conocemos son blancos. Este es un cisne. Por eso es blanco / este no es blanco – no puede ser un cisne. Esa fue una inferencia inductiva con mucho éxito empírico hasta que se decubrieron los cisnes negros de Australia).
La concepción inductivista estrecha de la investigación científica defiende la posibilidad de encontrar verdades ciertas con el método inductivo si se toma los siguientes pasos: observar y registrar todos los hechos; analizar y clasificarlos; derivar generalizaciones inductivas de ellos; y por fin contrastar las generalizaciones. Hempel dice que esta visión de la inducción perfecta no es posible en el mundo real por varias razones. Por un lado es simplemente impracticable porque en ningun momento podemos disponer de informaciones acerca de todos los hechos (tendríamos que esperar hasta el fin del mundo) y porque incluso la información que podríamos tener ahora (con una mente perfecta) ya sería infinita. Pero por otro lado tampoco sería posible tomar en cuenta sólo todos los datos relevantes para un problema, porque los datos (como muestra el ejemplo de Semmelweis) pueden ser muy heterogéneos y encontrarse en lugares totalmente diferentes. Por eso, para poder buscar información en el mundo que puede ayudarnos a resolver cualquier problema, es imprescindible tener anteriormente un hipótesis. Sólo cuando tienes una idea acerca de la solución de un idea, puedes recoger los datos necesarios y clasificarlos de una manera útil para falsificar o comprobarla.
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- Theresa Marx (Autor), 2010, “Filosofía de la ciencia natural” de C.G. Hempel - Un resumen crítico, Múnich, GRIN Verlag, https://www.grin.com/document/180431