Para combatir la Triquinosis hay que empezar desde el principio, el cual es evitar el contagio de la enfermedad en los animales que luego serán consumidos. Para ello SENASA en su web recomienda a los criadores de cerdos mantener el ambiente de crianza en condiciones higiénico-sanitarias apropiadas y evitar que estén en contacto con la basura y que no ingieran desperdicios. Igualmente, por más recomendaciones que se realicen siguen apareciendo casos como veremos a continuación.
INTRODUCCIÓN
La Triquinosis (Trichinellosis) como indican Jorge Caracostantogolo y Mara L. Martínez, “es una enfermedad parasitaria transmisible por los alimentos. El agente causal es un nematodo filiforme perteneciente al género Trichinella”. (1)
Una enfermedad parasitaria es aquella que se transmite por medio de un parasito, organismo que se alimenta de las sustancias que elabora un ser vivo de distinta especie. En este caso, estos parásitos (Triquina), se trasmiten por medio del consumo de alimentos infestados por ellos.
En el caso de la Triquinosis como se expresa en la página web oficial de SENASA, “las personas se enferman al consumir carne insuficientemente cocida o productos sin cocción, elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres como el jabalí o el puma, que contienen en sus músculos larvas de parásitos del género Trichinella”. (2)
Las personas enferman al consumir la carne infectada mal cocida, porque al no llegar al punto de cocción (elevar la temperatura del alimento a 100°), no se suele eliminar de manera eficaz la presencia tanto de Triquina como de otros organismos microscópicos.
La razón principal de la aparición de los productos alimenticios formados por carne sin cocción y mal cocinada, se debe a la distribución y producción cacera de estos. Esta misma producción al ser artesanal, carece de los procedimientos de elaboración correspondientes y por este motivo siempre se corren riesgos de contagio al consumirlos.
Como se aclara en la página web del Gobierno Nacional Argentina, los síntomas de la Triquinosis suelen ser: fiebre, dolores musculares, diarrea, vómitos, hinchazón de párpados y picazón. (3)
Esta enfermedad debe ser tratada lo más rápido posible, ya que si la Triquina logra ubicarse en los músculos del diafragma, no existe un tratamiento específico para destruirla.
Para combatir la Triquinosis hay que empezar desde el principio, el cual es evitar el contagio de la enfermedad en los animales que luego serán consumidos. Para ello SENASA en su web recomienda a los criadores de cerdos mantener el ambiente de crianza en condiciones higiénico-sanitarias apropiadas y evitar que estén en contacto con la basura y que no ingieran desperdicios.
Igualmente, por más recomendaciones que se realicen siguen apareciendo casos como veremos a continuación.
CONTENIDO
En Cataluña, España en los últimos años comenzaron a aumentar los casos de Triquinosis. Esta enfermedad se propaga por los jabalies salvajes, y como expresa Marta Rodríguez “el aumento de la triquinosis se debe a la suma de varios factores. Por una parte el aumento de jabalíes y por otra el aumento de capturas, que también hace que los cazadores dejen más restos tirados en los bosques. Esto facilita el acceso de jabalíes y otros animales a ellos, que a su vez resultan infectados si lo estaba la carroña consumida”. (4)
En Cataluña se registró un aumento en la población de jabalíes, lo cual provocó un aumento importante en los casos de Triquinosis, ya que al aumentar el número de capturas, también se incrementó la aparición de jabalíes infectados.
Los restos abandonados de estos animales provoca la propagación de la enfermedad entre los jabalíes y el resto de los animales que ingieran la carroña, ya que esta puede estar infectada. Luego los animales que se contagian pueden ser cazados y consumidos por las personas, las cuales pueden llegar a contraer la enfermedad sí, como se informa en el periódico “El País”, no se cocina la carne a más de 77° durante media hora. (4)
En Argentina los casos de Triquinosis son diferentes a los casos registrados en Cataluña. En el caso de esta última, los contagios se producen por el consumo de carne infectada por triquina de jabalies salvajes. Esta carne no suele ser comercializada, sino que es consumida por el cazador de la presa y su circulo familiar. En Argentina los casos de infección se producen por el consumo de chacinados, productos preparados sobre la base de carne y/o sangre, vísceras u otros subproductos animales, o embutidos de elaboráción casera, los cuales estan infectados por el parásito y son comercializados.
En 2015 como informa Fabiola Czubaj, se detectaron 204 casos en diferentes localidades en la provincia de Buenos Aires (5). Este tipo de propagación se produce principalmente por el consumo de productos vendidos en carnicerias y supermercados elaborados con carne proveniente de criaderos de cerdos sin habilitación.
Otro tipo de propagación, como expresa Nora Traietta, médica de la Unidad Sanitaria de Roberts, ocurre cuando se consumen chacinados frescos de carne cruda sin control bromatológico (5). Estos suelen consumirse recién comprados, por los cual si están infectados con triquina, contagia a la persona. Estos productos deben cocinarse o congelarse antes de ingerirlos para eliminar al parásito.
En la ciudad de Chivilcoy en 2016, se detectaron casos positivos de triquinosis, pero a diferencia de los casos anteriores, fueron detectados no en personas, sino en muestras de carne analizadas en el Centro Universitario Chivilcoy. Como informa la página web de la Municipalidad de Chivilcoy, “el análisis realizado por la Municipalidad en muestras que presentó un vecino que iba a hacer facturas de cerdo, permitió detectar la existencia de triquinosis. La intervención evitó que afectara a los consumidores” (6). Esto es algo positivo ya que el dueño de la carne actuó bajo las normas de seguridad correspondientes, llevando a analizar las respectivas muestras.
También debido a este gran acto de responsabilidad del vecino, se evitó la posible propagación del parasito en la población, además de que sirve de ejemplo para concientizar a los productores de productos cárnicos sobre la Triquinosis, y alentarlos a realizar los estudios necesario para el bien de la salud pública.
Para finalizar con el tema, se realizó una encuesta donde fueron partícipes 20 personas.
Estos fueron los resultados.
Pregunta N°1: ¿Sabe usted que es la Triquinosis?
- SI (16 personas)
- NO (4 personas)
Pregunta N°2: ¿Sabe usted como evitar la Triquinosis?
- SI (16 personas)
- NO (4 personas)
Como se puede apreciar, las mismas personas que conocen la enfermedad, son las mismas que también saben cómo evitarla. Esto es muy importante, ya que solamente con el conocimiento de la Triquinosis no alcanza para evitar ser contagiado, sino que también hay que saber cómo combatir contra ella.
Pregunta N°3: ¿Que tan seguido usted consume productos derivados de la carne de producción casera/artesanal?
-MUCHO (0 personas)
-A VECES (6 personas)
-MUY POCO (6 personas)
-NUNCA (8 personas)
Aquí lo que se quiso demostrar con esta pregunta, fue ver que tan expuestas están las personas en base a la cantidad de comida de elaboración artesanal que consumen en su vida cotidiana, ya que este tipo de producciones son una de las principales causas del contagio de la Triquinosis.
Nadie respondió “MUCHO”, por lo cual, nadie que ha respondido esta encuesta se encuentra con grandes chances de ser contagiado con la triquina debido al consumo de algún producto cárnico infectado mal cocinado.
Un total de 12 personas (60%), contestaron “A VECES” y “MUY POCO”. La brecha entre estas es muy pequeña, por eso lo analizamos de igual manera.
Si estas 12 personas forman parte de quienes conocen y saben cómo evitar la Triquinosis, no deberían tener problemas con estos alimentos. Pero si de estas 12 personas se incluyen alguna o todas de las que contestaron que no conocen a la enfermedad, ante una mala manipulación de un producto artesanal infectado, podrían terminar contrayendo el parásito de la triquina.
Un total de 8 personas respondieron “NUNCA”. Estas personas no se contagiarían nunca por el consumo de comida artesanal o casera, debido a que no es un segmento de la población que la consuma. Es imposible el contagio mediante esta forma ya que al no consumirla, no existe la posibilidad lógica de contagiarse.
Si aparece algún caso de Triquinosis en alguna de estas personas, no será por el consumo de productos cárnicos artesanales, sino posiblemente por el consumo de algún producto elaborado por criaderos sin habilitación comercializado en alguna carnicería o supermercado.
RECOMENDACIONES
Para evitar la propagación de la Triquinosis se harán algunas recomendaciones.
El gobierno, con sus organismos estatales especializados, deberia controlar mas rigurosamente a los criaderos y expandirse controlando tambien la faena domiciliaria.
Exigir el analisis de muestras a cualquiera que produzca estos alimentos. Se extrae una muestra de entraña del animal, mantener la muestra de 40g refigerada hasta que se la envie al laboratorio, si da positivo de triquina no consumir ni elaborar ningun producto con esta carne. Luego se notifica a SENASA y se encargan de que no se transmita la Triquinosis.
Establecer un control sobre los productos que son comercializados en carnicerias y supermercados. Los productos solo pueden ser comercializados si contiene el rótulo (información que contiene: denominación de venta del alimento, lista de ingredientes, contenido neto, identificación del origen, identificación del lote, fecha de duración mínima, preparación e instrucciones de uso del alimento cuando corresponda) con su información correspondiente.
Crear campañas de concientización social sobre la Triquinosis y el riesgo sobre el consumo de productos cárnicos de elaboración casera.
CONCLUSIÓN
La causa principal de la continua aparición de casos de Triquinosis se debe a la falta de control sobre la venta, tanto de productos de elaboración casera, como tambien de productos comercializados elaborados en criaderos sin habilitación. Las instalaciones de estos criaderos son muy precarias y los cerdos se alimentan con desechos infectados de triquina que los rodean.
Este tipo de criaderos se debe no solo a la falta de inspección por parte del Estado, sino que tambien se deben a la situación economica del pais. Estos criaderos son comunes en paises tercermundistas como por ejemplo, Argentina y México.
En el caso de los paises primermundistas como España, no se trata de criaderos ilegales de condiciones precarias, sino de la caza de jabalies salvajes infectados, y la ignoracia de como eliminar al parasito de la triquina.
Bibliografía
1. Jorge Caracostantogolo y Mara L. Martínez, en “Epidemiología de la Trichinellosis y situación en la Argentina”, Revista Veterinaria Argentina, 2009. LINK: http://www.veterinariargentina.com/revista/2009/09/epidemiologia-de-la-trichinellosis-y-situacion-en-la-argentina/
2. Página web oficial de SENASA, Salud pública, en “TRIQUINOSIS: recomendaciones para productores porcinos”, 2015. Link: http://www.senasa.gob.ar/senasa-comunica/noticias/triquinosis-recomendaciones-para-productores-de-porcinos
3. Página web oficial del Gobierno Nacional Argentino, Ministerio de Salud, Glosario de Salud. LINK: https://www.argentina.gob.ar/salud/glosario/triquinosis
4. Marta Rodríguez, en “El aumento de Triquinosis dispara las alarmas”, Periódico “El País, 2016. LINK: https://elpais.com/ccaa/2016/03/06/catalunya/1457287472_583432.html
5. Fabiola Czubaj, Diario “La Nación”, 2015. LINK: https://www.lanacion.com.ar/1828293-mas-de-200-personas-afectadas-por-dos-brotes-de-triquinosis
6. Página web oficial de la Municipalidad de Chivilcoy, 2016. LINK: http://chivilcoy.gov.ar/?p=3290
- Quote paper
- Enzo Comolli (Author), 2018, ¿Como prevenir la Triquinosis?, Munich, GRIN Verlag, https://www.grin.com/document/435466
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